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El concepto transformación digital aún resulta para algunas personas un concepto abstracto y difícil de asimilar. Escuchar el término «digital» lleva a pensar únicamente a herramientas digitales: «Nosotros ya estamos transformados digitalmente, tenemos web, utilizamos correo electrónico, redes sociales, whatsapp, google drive» ¿Te suena? Utilizar herramientas digitales, estas u otras, no implica que una empresa haya realizado un proceso de transformación digital.

¿Qué es la transformación digital?

La transformación digital es un proceso por el cual la empresa adapta su personal, sus procesos y sus herramientas al contexto tecnológico actual en función de su situación de partida, su propio contexto y la definición de sus objetivos. Es una decisión estratégica para asegurar la supervivencia así como competitividad de las empresas.

Algunas compañías no terminan de asumir la urgencia de la transformación digital porque simplemente están esperando que la pandemia termine para poder «volver a hacer las cosas como antes», como si fuese cuestión de dar marcha atrás a las manecillas del reloj.

Afortunadamente otras se están moviendo rápido impulsadas o no por las ayudas institucionales, se han  dado cuenta de que la pandemia ha sido simplemente un catalizador y que no hay marcha atrás.  Lo que evidentemente va a hacer que asistamos a cambios muy significativos en la situación y evolución de las empresas de nuestro entorno.

Atendiendo a la compresión del concepto de transformación digital podríamos dividir a las organizaciones en dos grandes grupos:

  • Las que han comprendido la propuesta de valor de la transformación digital y el alcance que consigue en la empresa.
  • Las que ven la transformación digital simplemente como una receta de consultoría y por tanto no la incluyen como una prioridad.

El análisis de las situación de partida de la empresa, la detección de necesidades y contar con un experto tecnológico que marque una hoja de ruta es determinante. Lejos de ser una receta de consultoría es una propuesta de valor enorme al alcance no solo de grandes empresas, también de las pymes, micropymes y organizaciones unipersonales lideradas por autónomos (mayoritarias en nuestro país)

Para las empresas pequeñas y los autónomos realizar una transformación digital equivale a contar durante un tiempo con un departamento de innovación dentro de su organización. Un departamento  que analiza, optimiza y genera un plan de acción que engloba la actividad, a las personas que integrar la organización y las herramientas digitales.

Todas las empresas pueden y deben transformarse digitalmente para ser competitivas dentro de su sector. Ya que entre otras cosas, necesitamos contar con organizaciones preparadas para trabajar en entornos en continuo cambio (que es y seguirá siendo la realidad de nuestro presente y futuro cercano) y esta es una de las cuestiones que se consigue con la transformación digital.

Debemos tener claro de una vez por todas que la transformación digital no implica únicamente tecnología sino que integra: personas, procesos y tecnología.

¿Cuál es el impacto que consigue la empresa con su transformación digital?

  1. Toma decisiones estratégicas basadas en los datos y no en suposiciones. Disponer de un enfoque impulsado por datos (metodología data driven) consigue una gran ventaja competitiva.
  2. Aumenta la productividad al automatizar muchas de las tareas y procesos que hasta el momento se realizan de forma manual por parte de ventas, marketing, finanzas, calidad, recursos humanos, producción.
  3. Reducción de costes, aunque la transformación digital debe contar con un presupuesto dedicado para su implementación, a la larga supone una ahorro de costes gracias a la mejora de la productividad en la que se automatizan procesos que da lugar a entre otras cosas que se disminuyan errores en multitud de tareas así como plazos de entrega de productos o servicios.
  4. Mejora la colaboración interna al tener bien definidos los procesos y en muchos casos automatizados los trabajos colaborativos resultan más eficaces.
  5. Mejora de la experiencia del empleada/o gracias a la automatización y en algunos casos a la descentralización del puesto y la posibilidad de trabajar en remoto. Esta autonomía ayuda además a retener el talento y a disponer de un mayor reconocimiento de la empresa por parte de futuros empleados.
  6. Incrementa de los beneficios gracias entre otras cosas a la detección de nuevas oportunidades de negocio.
  7. Mejora la experiencia del cliente gracias a la personalización que se logra a través del conocimiento de los clientes.
  8. Adaptación al cambio y evolución continua, al actuar en función de los datos, simplificar la organización del trabajo, al agilizar los procesos y contar con personal más productivo se está en disposición de tomar decisiones de forma ágil.

Para lograr estos beneficios en AKAMMEDIA trabajamos con la empresa en 10 fases fundamentales en su transformación digital:

  • Liderazgo en el proceso de transformación.
  • Sistemas de organización ágiles.
  • Soluciones digitales de producto y/o servicio.
  • Estrategia CRM y ERP.
  • Comunicación digital interna (Employer Branding)
  • Hoja de ruta digital.
  • Presupuesto dedicado.
  • Experiencia de cliente y comunicación.
  • Inteligencia e Innovación.
  • Necesidades de formación digital.

En base a nuestra experiencia estamos en disposición de asegurar que no es posible dar marcha atrás a las manecillas del reloj y que de las decisiones que tomemos hoy, va a depender la situación de nuestra empresa mañana. Consúltanos si necesitas más información

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